Qué significa tener la piel del rostro amarilla
Al mirarnos al espejo podemos notar distintos signos en nuestro rostro: cansancio, ojeras, estrés y hasta falta de ánimo. Sin embargo, muchos se preguntan qué significa tener la piel del rostro de color amarilla, algo que muchas veces puede ser alarmante porque representa un grave problema de salud.
¿Qué sucede si tengo la piel del rostro amarilla?
Profesionales indican que si nuestro rostro exhibe una tonalidad amarillenta, nos enfrentamos a un déficit de una de las vitaminas más importantes: la B12.
La vitamina B12 desempeña un papel crucial en la producción de glóbulos rojos, el mantenimiento de los nervios y la formación del ADN. Sin ella, nuestro cuerpo comienza a funcionar de manera inadecuada, y los signos pueden manifestarse en nuestro rostro.
Una de las señales más evidentes de una deficiencia de vitamina B12 es la ictericia, una coloración amarillenta de la piel y los ojos. Esto ocurre porque el cuerpo no puede producir suficientes glóbulos rojos sanos, lo que lleva a una acumulación de bilirrubina, un pigmento que le da ese tono amarillento a la piel.
Además, este color en nuestra piel se combina con dolores faciales que pueden ser agudos y punzantes hasta leves molestias. La ubicación del dolor también puede variar, afectando mejillas, frente, nariz o cuero cabelludo.
¿Por qué se produce la deficiencia de vitamina B12?
La deficiencia de vitamina B12 puede tener diversas causas, como una mala absorción intestinal, una alimentación inadecuada (especialmente en veganos y vegetarianos estrictos) o ciertas condiciones médicas.
En este marco expertos recomiendan:
- Incluir alimentos de origen animal en la dieta: Carnes rojas, aves, pescado, huevos y productos lácteos son excelentes fuentes de vitamina B12.
- Suplementos: En casos de deficiencia severa, el médico puede recomendar suplementos de vitamina B12, ya sea en forma de comprimidos o inyecciones.