Ni vinagre ni bicarbonato: el barato ingrediente que debes arrojar a tu inodoro para quitarle la suciedad

Recientemente, ha circulado un truco casero que promete mejorar la limpieza y el mantenimiento del inodoro. Este método, que se aplica antes de dormir, es recomendado por algunos especialistas en el cuidado del hogar como una forma efectiva de eliminar malos olores y prevenir posibles obstrucciones en las cañerías.

¿Cómo limpiar el inodoro?

Este truco consiste en verter media taza de sal gruesa directamente en el inodoro, dejándola actuar toda la noche sin tirar la cadena. Al día siguiente, se recomienda verter agua caliente para potenciar su efecto limpiador, y opcionalmente, agregar bicarbonato de sodio para lograr una limpieza más profunda.

Este proceso no solo ayuda a eliminar los malos olores, sino que también actúa como un desengrasante natural, descomponiendo residuos acumulados en las cañerías. Además, al ser una alternativa natural a los productos químicos, este método puede aplicarse semanalmente para mantener el baño limpio y en óptimas condiciones.

¿Por qué se forma sarro en el inodoro?

El sarro en el inodoro se forma debido a la acumulación de minerales presentes en el agua, como el calcio y el magnesio, que se quedan adheridos a las superficies cuando el agua dura se evapora. Las principales causas de la acumulación de sarro incluyen el uso de agua dura, la falta de mantenimiento regular y el estancamiento del agua, que permite que los minerales se incrusten con el tiempo.

Para evitar la acumulación de sarro en el inodoro, es importante realizar una limpieza regular y utilizar algunos métodos naturales o soluciones tecnológicas. Se recomienda limpiar el inodoro al menos una vez a la semana con un cepillo y toallita limpiadora, y repetir el proceso cada semana o cada quince días, según la dureza del agua y la frecuencia de uso.

El vinagre blanco es eficaz para prevenir la acumulación de minerales en la taza del inodoro; una mezcla de media taza de vinagre, media taza de bicarbonato y una taza de agua, aplicada en el inodoro y dejada reposar por una hora, ayuda a eliminar los residuos. También se puede usar jugo de limón, añadiendo el jugo de dos limones a la taza y dejándolo reposar durante cinco minutos antes de descargar agua para retirar las manchas.