Mitos y verdades de las suculentas: esto debes hacer para que tus plantas no se sequen
Si tienes suculentas en casa, seguramente estarás confiado porque son plantas resistentes, ideales para principiantes de jardinería. Sin embargo, es cierto que existen algunos mitos entorno a este tipo de especies que nos permiten relajarnos en su cuidado. Es menester estar informados al respecto porque estos ejemplares podrían morirse si no le prestamos la atención adecuada.
3 mitos y verdades sobre las suculentas
- Las suculentas no necesitan agua
Muchos principiantes en jardinería aseguran que las suculentas no necesitan agua porque la producen, por lo que pueden sobrevivir a la perfección con poca o nula agua. Esto es un mito, debido a que dichas plantas deben ser regadas profundamente durante los meses más cálidos, desde septiembre hasta fin de marzo, permitiendo que el agua llegue a las raíces más profundas y drene por la parte inferior de la maceta.
Aunque, el riego no debe ser en exceso ni muy frecuente, debido a que las raíces se pudrirán y la planta morirá.
- Las suculentas son plantas fáciles de cuidar
El cuidado de las suculentas no es tan sencillo como muchos creen. Si bien son plantas más resistentes que otras especies, requieren condiciones específicas de humedad y luz para evitar enfermedades o malformaciones.
Por ejemplo, una iluminación inadecuada o la falta de circulación de aire pueden comprometer su salud, particularmente por la propagación de plagas que pueden atentar contra su bienestar.
- Las suculentas no necesitan podas
Al igual que otras plantas, algunas suculentas requieren podas puntuales para mantener su forma o estimular el crecimiento, dependiendo también de la especie de la que estemos hablando: no es lo mismo podar un árbol de jade que podar un cactus.
Lo que comparten en común este tipo de plantas es la importancia de retirar los brotes muertos o dañados y asegurarse de que no esté sobrecargadas de ramas viejas que puedan obstaculizar su desarrollo.