Los tres pasos que recomienda un experto en psicología del comportamiento para calmar a una persona enojada

Los beneficios de la psicología, ya sea estudiarla o tomar consulta, nos sirve para poder mejorar nuestra vida y comportamientos. En este contexto, Douglas E. Noll, abogado y experto en resolución de conflictos del Congreso estadounidense, desarrolló un método práctico para calmar a una persona enojada en cuestión de segundos y debes conocerlo.

¿Cómo calmar a una persona enojada?

Según Noll, durante un episodio de ira, el cerebro activa respuestas emocionales automáticas aprendidas en la infancia, dominando las funciones racionales. Por ello, sugiere ignorar las palabras de la persona y centrarse en las emociones subyacentes para gestionar el conflicto de manera efectiva.

El enfoque consiste en tres pasos fundamentales. Primero, es crucial evitar reaccionar al contenido verbal, incluso si resulta hiriente, y dirigir la atención hacia las emociones que motivan la ira. Luego, es importante identificar y etiquetar esos sentimientos, como la frustración o el miedo, y expresarlos con frases empáticas, como “parece que estás molesto”, para mostrar comprensión.

Finalmente, Noll recomienda utilizar un lenguaje en segunda persona para validar las emociones del interlocutor y crear una conexión emocional que reduzca la tensión. Este método, respaldado por investigaciones como las del neurocientífico Antonio Damásio, no solo ayuda a calmar a personas furiosas, sino que también ofrece herramientas para manejar conflictos en diversos entornos, desde el hogar hasta el trabajo.

¿Cómo se comporta una persona enojada?

El enojo es una reacción natural y adaptativa ante amenazas, que nos impulsa a defendernos mediante sentimientos y conductas agresivas. Sin embargo, aunque esta emoción es esencial para la supervivencia en cierta medida, no podemos reaccionar de manera agresiva ante todo lo que nos irrita debido a las leyes, las normas sociales y el sentido común, que establecen límites claros.

Otra estrategia es reprimir el enojo, redirigiéndolo hacia actividades positivas. Esto implica contener la emoción y enfocarse en acciones constructivas, con el objetivo de transformar el enojo en algo útil. Sin embargo, esta respuesta puede ser perjudicial si el enojo no se libera adecuadamente, ya que su acumulación interna puede derivar en problemas físicos como hipertensión o depresión. Por lo tanto, es crucial encontrar un equilibrio adecuado para gestionar esta emoción de manera constructiva.

La psicología nos ayuda a entender muchos comportamiento del ser humano y a controlar varias crisis que atravesemos. Aprende a identificar actitudes peligrosas y frenarlas a tiempo.