La planta de hermosas flores que atrae mariposas al jardín y llena de vida tu parque

La jardinería puede ser una forma maravillosa de conectar con la naturaleza, y añadir plantas que florecen en otoño o que son imanes para mariposas y otros polinizadores puede hacer de tu espacio un verdadero refugio natural. Con el cuidado adecuado, puedes llenar tu jardín de color, fragancia y movimiento, disfrutando de un paisaje siempre vibrante.

¿Cuál es la planta que atrae mariposas a mi jardín?

La Senna corymbosa, también conocida como Rama Negra, es un arbusto o pequeño árbol que destaca por su atractivo en el jardín, especialmente durante el otoño, cuando sus flores amarillas brillantes contrastan con el cambio de colores en las hojas. Este ejemplar no solo embellece el espacio, sino que atrae a una gran cantidad de mariposas, abejas y colibríes, lo que lo convierte en un verdadero imán de biodiversidad.

Originario de América del Sur, puede crecer hasta más de 2 metros si no se poda, y se adapta fácilmente a jardines domésticos en climas templados. Aunque tolera heladas suaves, es importante protegerlo durante el otoño y el invierno en regiones frías. Este árbol se caracteriza por su tronco oscuro y hojas que se pliegan con la sombra o por la noche.

Florece en verano y otoño, y sus flores, además de ser visualmente atractivas, tienen un suave perfume. Incluso después de la floración, sus vainas cilíndricas permanecen colgando durante el invierno, lo que sigue aportando belleza a tu jardín. Es una especie de fácil cuidado, ya que se reproduce bien por semillas o esquejes, y requiere poco mantenimiento.

Prefiere suelos bien drenados, ligeramente fértiles, y puede tolerar tanto suelos ácidos como neutros o alcalinos. El riego debe ser profundo y espaciado, evitando el exceso de agua para no dañar sus raíces. Con estos cuidados mínimos, la Senna corymbosa será una opción ideal para llenar tu jardín de vida y color.

¿Cómo atraer mariposas a mi jardín?

Para atraer mariposas a tu jardín, es importante crear un ambiente que les ofrezca todo lo que necesitan. Plantar flores ricas en néctar, como caléndulas, girasoles, margaritas, lantanas y lavandas, es esencial, ya que las mariposas se sienten atraídas por los colores vivos y los racimos florales.

Además, para complementar la dieta de las mariposas, puedes proporcionarles frutas maduras como naranjas, plátanos y peras, así como charcos de barro o arena mojada para que obtengan las sales minerales que necesitan. Es fundamental ofrecerles también un lugar adecuado para posarse, beber agua y criar a sus crías, asegurándote de que el jardín sea seguro y tenga suficiente luz solar directa, al menos seis horas al día.