La dieta que debes hacer para bajar de peso y combatir el envejecimiento celular

Existen dietas de todo tipo para bajar de peso y mejorar distintos parámetros de salud. Aunque, hay una que se destaca por ayudar, al mismo tiempo, a rejuvenecer el organismo debido a que le pone freno al envejecimiento celular. Descubre de cuál se trata y cambia tu alimentación.
Esta es la dieta que recomiendan todos los profesionales
La dieta mediterránea se caracteriza por una alta ingesta de alimentos de origen vegetal. Esto incluye una variedad de semillas, hierbas aromáticas, frutos secos, cereales integrales, verduras, frutas, legumbres y especias. Además, el aceite de oliva virgen extra constituye la principal fuente de grasa añadida en este tipo de alimentación.
Especialistas cuentan que este enfoque dietético, que también incorpora pescado y aves de corral de forma moderada, limita el consumo de lácteos y restringe la carne roja, ha demostrado tener efectos protectores contra el envejecimiento celular.
En concreto, un estudio llevado a cabo por el Centro de Investigación Biomédica en Red de Obesidad y Nutrición analizó cómo esta alimentación influye positivamente en diversos parámetros metabólicos. Los hallazgos revelaron mejoras significativas en las concentraciones de colesterol HDL, así como una tendencia a la disminución del peso corporal en los participantes.
En esta línea, se observó que la dieta mediterránea modula la longitud de los telómeros, estructuras protectoras ubicadas en los extremos del ADN genómico dentro de los cromosomas. Los telómeros desempeñan un papel crucial en el mantenimiento de la estabilidad cromosómica; su acortamiento progresivo se asocia directamente con el envejecimiento del organismo.
La riqueza en antioxidantes y compuestos bioactivos presentes en los alimentos característicos de la dieta mediterránea contribuye a preservar la longitud telomérica, retrasando así el proceso de envejecimiento celular.
Además, la investigación evaluó el impacto de la dieta mediterránea en el estrés oxidativo, un factor clave en el daño celular y el envejecimiento. Al comparar sus efectos con la restricción calórica y la actividad física, los resultados resaltaron el potencial de la dieta para mejorar la calidad de la alimentación y mitigar el riesgo de desarrollar diversas enfermedades asociadas al envejecimiento.