Esto es lo que tienes que hacer con tu romero para que no se muera
Cuidar de nuestra planta de romero es fundamental, ya que tiene múltiples beneficios para nuestro hogar, como ahuyentar diversas plagas de insectos que atacan a las demás especies y a tu familia. Por este motivo, es muy importante que aprendas y pongas en práctica estos tips de jardinería a la hora de tener uno estos ejemplares en tu hogar.
¿Cómo cuidar mi planta de romero?
El romero es una planta que, en libertad, alcanza hasta dos metros de altura, y de manera doméstica requiere cuidados específicos para mantenerse saludable y crecer vigorosamente. Es esencial controlar el riego, ya que no tolera el exceso de agua; sus raíces son susceptibles a pudrirse si el suelo permanece húmedo por mucho tiempo. Por ello, se recomienda regarlo moderadamente, permitiendo que el sustrato se seque entre riegos. Signos como hojas amarillentas o tallos blandos suelen indicar un exceso de humedad.
Si se cultiva en macetas, estas deben contar con buen drenaje, preferiblemente de terracota, que favorece la transpiración y previene la acumulación de agua. No olvides comprar unas amplias, de al menos 30 centímetros de diámetro, y no es aconsejable colocar platos debajo, ya que retienen agua innecesaria.
La ubicación del romero es muy importante. Necesita luz solar directa durante varias horas al día, ya que la luz que pasa a través de una ventana no es suficiente. Si no recibe la iluminación adecuada, su crecimiento se debilita y las hojas pierden su característico color verde intenso. En regiones con inviernos severos, es recomendable trasladarlo al interior, asegurando una buena ventilación y luz cerca de una ventana. Cuando el clima mejore, lo ideal es devolverlo al exterior.
¿Cómo plantar mi planta de romero?
Para quienes lo cultivan directamente en el suelo, es importante elegir un área elevada o crear una loma para evitar encharcamientos. El romero prospera en suelos con buen drenaje, preferiblemente arenosos, que simulan su entorno natural. Además, aunque no es exigente, prefiere sustratos pobres en nutrientes.
Un exceso de fertilizantes puede afectar negativamente su desarrollo y la producción de aceites esenciales. Mezclar tierra con arena gruesa o perlita es una opción ideal para su cultivo.
La poda también es esencial para mantener la planta vigorosa. Se deben eliminar las ramas secas o débiles y recortar las puntas para estimular un crecimiento denso, pero sin excederse, especialmente si está floreciendo, ya que las flores forman parte de su ciclo natural.
Además, las plantas de romero tienen muchos beneficios en el mundo de la belleza, ya que sirven para "tapar" las canas y teñir el cabello de manera natural. Por este motivo, debes cuidarlo y tratar de que no se marchite ni se llene de ninguna plaga.