Esto es lo que sucede si guardas una botella de vino con un corcho viejo
Las botellas son de los elementos más reciclados en los hogares, se convierten en nuevos recipientes de otras bebidas, en floreros, macetas y miles de objetos nuevos y para ello debes limpiarla y desinfectarla correctamente y evitar así que se generen nuevas bacterias. Sin embargo, si aún le queda un poco de vino y deseas conservarlo, debes evitar a toda costa volver a colocarle un corcho viejo o de otro recipiente.
¿Qué sucede si utilizo un corcho viejo en mis vinos?
Guardar una botella de vino abierta de forma incorrecta, como volver a ponerle el corcho, puede afectar gravemente su sabor y calidad. Aunque el vino cerrado puede durar años gracias a su envasado al vacío, al abrirlo comienza una cuenta regresiva debido al contacto con el oxígeno, que altera sus características. Reintroducir el corcho deja espacio para que el aire penetre, acelerando el deterioro. Una alternativa eficaz es usar un tarro de cristal con tapa hermética, que minimiza la exposición al oxígeno y prolonga la vida útil del vino.
Según las recomendaciones de expertos, como las de Bodegas Murillo, es fundamental almacenar las botellas cerradas en posición horizontal para mantener el corcho húmedo, preservando su elasticidad y hermetismo. También se debe evitar moverlas innecesariamente o someterlas a vibraciones, asegurando un reposo adecuado.
Durante estas fiestas, al disfrutar de un buen vino, es importante consumir primero las botellas más antiguas y conservar las nuevas adecuadamente. De esta manera vas a garantizar su calidad y sabor en cada ocasión.
¿Cómo conservar mis vinos?
Para conservar el vino adecuadamente, es importante mantenerlo entre 8º y 15ºC, dependiendo de si es blanco, rosado o tinto, y almacenarlo en la nevera una vez abierto. Las botellas cerradas deben colocarse en posición horizontal para mantener el corcho húmedo, mientras que las abiertas deben mantenerse en posición vertical.
También es fundamental proteger el vino de la luz solar o eléctrica, ya que esto puede oxidarlo, y garantizar una humedad ambiental entre el 80% y 85%. El entorno ideal para el vino debe ser oscuro, libre de ruidos y vibraciones, y alejado de olores que puedan ser absorbidos, como los de alimentos o productos de limpieza. Si no cuentas con un espacio adecuado, una cava eléctrica es una excelente opción para mantener estas condiciones controladas.
Por último, si lo que quieres es reciclar tus botellas, también tenemos para ti algunas ideas sencillas y efectivas para utilizarlas en tu jardín o cualquier lugar de tu casa. Aprende a darle una segunda vida a tus elementos y reducir tus desechos.