Dile adiós al agua: descubre la bebida repleta de nutrientes que debes tomar en su reemplazo
Cuidar de nuestra salud parece caro, complicado o aburridos en muchas ocasiones, sin embargo con pequeños cambios en nuestra dieta o rutina podemos hacerlo. Un ejemplo muy común es reemplazar las nueces o frutos secos que muchas veces tienen un valor graso elevado por anacardos, que ayudan a bajar de peso. Otra opción que muchos están implementando es reemplazar el agua por otra bebida repleta de nutrientes y beneficios para tu cuerpo.
¿Qué bebida puede reemplazar el agua?
Mantenerse hidratado es crucial debido a la pérdida de líquidos y minerales al sudar. Aunque el agua suele ser la bebida principal recomendada, recientes estudios sugieren que la leche podría ser aún más efectiva para hidratar el cuerpo. Esto fue develado por investigadores de la National Library of Medicine, donde aseguran que esta bebida blanca no solo hidrata, sino que también aporta nutrientes esenciales, como calcio para fortalecer los huesos, y ayuda a la recuperación muscular.
Además, al retrasar el vaciado del estómago, prolonga la sensación de hidratación. Sin embargo, debes ingerirla de manera moderada y no cancelar el agua de manera absoluta en tu dieta, ya que un exceso puede aumentar significativamente la ingesta calórica, especialmente en personas con actividad física baja. Según expertos, es seguro tomar hasta dos tazas de leche al día como parte de una dieta balanceada.
Complementarla con agua y otros alimentos hidratantes es clave para evitar excesos y mantener una nutrición equilibrada. Incorporar leche de forma moderada a tu dieta puede ser una estrategia efectiva para mantenerte hidratado saludable y obtener beneficios adicionales para la salud. Como siempre, es fundamental consumir con moderación y variar las fuentes de hidratación.
¿Cuánta agua debemos beber a diario?
La cantidad de agua que una persona necesita consumir diariamente varía según diferentes factores. Según la OMS, los adultos deberían beber aproximadamente 35 ml de agua por cada kilo de peso corporal. Esto significa que una persona de 50 kg necesita alrededor de 1,7 litros al día, mientras que alguien de 60 kg necesitaría 2,1 litros.
El nivel de actividad física también influye en las necesidades de hidratación. Durante el ejercicio, el cuerpo pierde líquidos a través del sudor, y se recomienda reponerlos bebiendo entre medio litro y tres cuartos de litro por cada medio kilo de peso perdido durante la actividad. El clima es otro factor determinante. En ambientes cálidos, húmedos, secos o en altitudes elevadas, es necesario aumentar la ingesta de bebidas para compensar las condiciones que favorecen la deshidratación.
La edad también juega un papel importante. Los niños sanos suelen necesitar unos 1,1 litros de agua al día, mientras que los adultos mayores deberían consumir al menos 1,5 litros para prevenir la deshidratación, que puede afectarles con mayor rapidez. Por último, las mujeres embarazadas y en período de lactancia tienen requerimientos especiales.
Si quieres seguir reemplazando alimentos no tan buenos por otros más amigables con tu salud, puedes evitar el consumo de chocolates y cambiarlo por el helado, ya que puede ser muy saludable si lo preparas tú mismo con tus frutas favoritas. Comer cosas deliciosas no siempre tiene que ser malo, aprender a equilibrar nuestra alimentación es lo mejor.