Dale una segunda oportunidad a tus prendas manchadas con desodorante para que luzcan como nuevas

Cuidar nuestra ropa no solo es importante para ahorrar dinero, sino para mantenernos siempre impecables ante cualquier ocasión, sobre todo cuidando las tonalidades originales de cada prenda para que no se destiñan o se estiren. Sin embargo, también es crucial que los productos de higiene personal que utilizamos no la dañen, como los desodorantes, y si lo hacen, aprender a quitarlo de inmediato.

¿Cómo quitar las manchas de desodorante?

Para quitar manchas de desodorante en prendas de color, basta con mezclar una cucharada de bicarbonato con tres de agua oxigenada. Aplica esta mezcla sobre la mancha, déjala actuar durante diez minutos y enjuaga con agua fría para recuperar el aspecto limpio de tus prendas sin dañarlas.

Por otro lado, las manchas de tinta pueden tratarse con vinagre blanco y bicarbonato. Aplica vinagre directamente sobre la mancha, déjalo reposar, y luego cúbrelo con bicarbonato. Frota suavemente con un cepillo o con las manos y enjuaga con agua fría. Repite si es necesario. Estos métodos simples y económicos permiten mantener la ropa impecable sin recurrir a productos químicos costosos.

¿Cómo reemplazar el desodorante?

Existen diversas alternativas naturales que puedes considerar para reemplazar el desodorante tradicional, aunque es importante tener en cuenta que no ofrecen el mismo efecto antitranspirante. Entre estas opciones, el bicarbonato de sodio destaca por neutralizar los olores y prevenir el crecimiento de bacterias, y puede aplicarse mezclado con agua.

El aceite de coco, gracias a sus propiedades antibacterianas y su agradable aroma, también es una buena elección. Otros ingredientes como el aceite esencial de árbol de té y el vinagre de sidra de manzana aportan propiedades antibacterianas y antifúngicas, mientras que el polvo de arrurruz es eficaz para absorber la humedad y neutralizar los olores.

La piedra de alumbre ayuda a reducir el sudor y minimizar el mal olor, y el jugo de limón, usado solo o combinado con bicarbonato, es otra opción popular. Por último, el spray de salvia y el ácido glicólico, aplicado después de la ducha, ofrecen beneficios adicionales para el control del olor corporal de forma natural.

Por último, las manchas de desodorante no son las únicas pesadillas de la ropa, ya que la cera es muy difícil de quitar también y muchos piensan que al entrar en contacto con la tela, ésta ya está perdida, pero no es así. Si eres novato en los trucos de limpieza o simplemente quieres reforzar los que ya tienen, estos pequeños actor te harán la vida mucho más fácil.